Descripción
Los frentes laminados de porcelana o carillas son unas finas láminas de cerámica que se adhieren a la superficie visible de los dientes anteriores.
Las coronas son también finas láminas de porcelana que recubren todo el contorno del diente, previamente desgastado en cantidad suficiente para que el grosor de tales láminas quede integrado con naturalidad en el tamaño del diente.
La principal indicación de unas y otras es mejorar la estética (mejorar la forma, restaurar fracturas, corregir colores intrínsecos anormales de los dientes –tinciones–), aunque también pueden corregir malas posiciones dentarias (principalmente, las coronas) y por tanto mejorar las posibilidades de higiene y con ello la conservación del aparato estomatognático.
Limitaciones
Estas láminas de porcelana no se pueden retirar de los dientes una vez cementadas, y si se hace, deben colocarse otras similares para recuperar el tamaño dentario, reducido con el tallado o desgaste que se necesita para colocarlas la primera vez. Por lo tanto constituyen un tratamiento irreversible.
La porcelana es frágil, por lo que si Ud. no es suficientemente cuidadoso y muerde objetos o alimentos tales como pipas, mariscos etc…, puede fracturar alguna de las carillas, lo que haría preciso reemplazarla por otra nueva.
Instrucciones para después de cementar las carillas
Durante los primeros 5 días
Se deben evitar los siguientes extremos:
- Comidas muy duras, demasiado frías ó excesivamente calientes.
- Bebidas que puedan pigmentar, como refrescos de cola, café, té, etc.
- Exceso de flúor, que las deslustra, o clorhexidina, que las tiñe.
Posteriormente
Cuídese de no hacer palanca con los dientes que llevan las carillas, porque podrían fracturarse.
Revisiones e incidencias
El plan de revisiones es el siguiente: una visita para comprobación del ajuste y tras los pequeños retoques que eventualmente fueran necesarios, dar el alta.
Posteriormente, se suelen realizar revisiones periódicas semestrales en las que comprobaremos el estado de los frentes laminados y de la boca en general, y se realizará la profilaxis (limpieza de mantenimiento), si, como es habitual, procediera.
¡ATENCIÓN!
Es importante recordarle siempre al higienista que Ud. es portador de carillas de porcelana, porque al ser casi imperceptibles puede no notarlas, y se debe evitar el uso de aparatos de ultrasonidos, los pulidos con materiales abrasivos, la aeroprofilaxis con bicarbonato, el flúor acidulado y la clorhexidina, que generalmente se manejan durante las profilaxis.